OpenAI se ha convertido en el proveedor líder mundial en el campo de la inteligencia artificial generativa y ahora cuenta con ventas anuales de más de dos mil millones de dólares. En 2024, la empresa aspira a alcanzar unas ventas de hasta cinco mil millones de dólares. Su sistema de lenguaje basado en inteligencia artificial o chatbot, ChatGPT, fue entrenado con textos protegidos por derechos de autor, incluidas letras de canciones del repertorio de unos 95.000 miembros de GEMA. Estos autores aún no han recibido ningún pago por el uso de sus obras.

Por ello, el 13 de noviembre de 2024, GEMA presentó una demanda ante el Tribunal Regional de Múnich para hacer valer las reclamaciones de sus miembros contra la empresa matriz estadounidense, OpenAI, LLC, y contra OpenAI Ireland Ltd., el operador del chatbot en Europa. El objeto de la demanda es la reproducción sin licencia de letras de canciones por parte del chatbot. Al introducir indicaciones sencillas, el chatbot reproduce la letra original de la canción con la que, evidentemente, se ha entrenado al sistema.

Mientras que otros servicios de internet pagan a los autores derechos de licencia por el uso de sus textos, OpenAI utiliza sistemáticamente el contenido de los autores, infringiendo deliberadamente los derechos de autor, y eludiendo así la remuneración justa.

Tobias Holzmüller, director general de GEMA, afirma: «Las canciones de nuestros miembros no son materia prima gratuita para los modelos de negocio de los proveedores de sistemas de inteligencia artificial generativa. Quien quiera utilizar estas canciones debe adquirir una licencia y remunerar a los autores de forma justa. Para ello hemos desarrollado un modelo de licencias. Estamos y seguiremos emprendiendo acciones legales contra el uso sin licencia».

Numerosos artistas alemanes de renombre, entre ellos Kristina Bach («Atemlos»), Rolf Zuckowski, Reinhard Mey, Inga Humpe, Thomas Eckert, Ulf Sommer y Peter Plate, así como sus editores musicales, apoyan la demanda de GEMA. Está demostrado que el chatbot ha utilizado las letras de sus canciones sin recibir remuneración.

El presidente del consejo de administración de GEMA, Ralf Weigand, afirma: «La semana pasada, con la Carta de IA de GEMA, dejamos claro que los logros creativos humanos no deben utilizarse como modelo gratuito para las ofertas de los proveedores de IA en una cadena de explotación profundamente comercial. Del mismo modo, no podemos aceptar que se produzcan infracciones de derechos de autor en el resultado de los chatbots. La demanda de GEMA envía una señal importante: está en juego la vida de los profesionales creativos».

A finales de septiembre, GEMA presentó un modelo de licencia generativa de IA. El objetivo es la participación justa de los creadores musicales cuando sus obras se utilizan en sistemas de entrenamiento, en la generación de nuevas canciones de IA o como parte de contenidos musicales generados por IA. En el pasado, GEMA ya había informado por escrito a los operadores de modelos y sistemas de IA que debían adquirir una licencia para utilizar las obras de GEMA.

El consejero general de GEMA, Kai Welp, afirma: «Las nuevas tecnologías nos plantean cuestiones jurídicas fundamentales que debemos resolver sin falta. Sólo así conseguiremos establecer en el mercado un modelo de concesión de licencias que consiga un equilibrio justo entre los intereses de los creadores y los de los explotadores. Nuestro procedimiento modelo contribuye decisivamente a ello, pero también demuestra que estamos dispuestos a hacer valer los derechos que les corresponden a los autores».

La Carta de IA de GEMA exige un enfoque responsable de la IA generativa. Incluye diez principios básicos, entre los que se incluyen la protección de la propiedad intelectual, la participación justa de los profesionales creativos en la creación de valor, la sostenibilidad y la transparencia y responsabilidad de los proveedores de IA.

GEMA representa los derechos de autor de unos 95.000 miembros en Alemania (compositores, letristas, editores musicales) así como de más de dos millones de titulares de derechos de todo el mundo. Es una de las mayores sociedades de autores de obras musicales del mundo.

Materiales adicionales

• Preguntas frecuentes sobre la demanda contra OpenAi
• Estudio «IA y música» (2024)